Cuando se trata de perder peso, lo recomendable es hacerlo de manera lenta y gradual. Esto se debe a que si adelgazamos muy rápido, podemos perjudicar nuestro organismo. Una de las maneras más comunes de perder peso rápidamente es a través de “dietas milagro” o rutinas de ejercicios estrictas. A pesar de que estas opciones suelen obtener buenos resultados en poco tiempo, generalmente tienden a ser temporales, ya que no son compatibles con nuestras vidas cotidianas. Por lo tanto, una vez que las dejamos de lado, ponemos en riesgo nuestra salud. Algunas de las consecuencias negativas de adelgazar muy rápido son:
- El efecto rebote:
El temido efecto rebote se produce cuando dejas de lado la dieta y no solo recuperas el peso que habías perdido, sino que también aumentas más kilos. Para evitar este efecto, es necesario que sigas una dieta balanceada que puedas mantener a largo plazo.
- Disminución del rendimiento y cansancio:
Una dieta desequilibrada y un bajo consumo de los nutrientes que necesitas pueden provocar fatiga y cansancio, por lo que tu rendimiento físico y mental se verán afectados de manera negativa.
- Problemas gastrointestinales:
Dependiendo del tipo de dieta que pruebes, el sistema gastrointestinal puede ser afectado. Como consecuencia, puedes sentir molestias, como estreñimiento, hinchazón o acidez. Por lo tanto, es mejor que pruebes una dieta saludable, que te permita perder grasa, y sobre todo, que te haga sentir bien y lleno de energías.
- Complica tu relación con la comida:
Las dietas estrictas como las dietas milagro suelen empeorar nuestra relación con la comida. En lugar de premiarnos o castigarnos con la alimentación, es mejor crear consciencia de lo que comemos para así tomar decisiones inteligentes y saludables.
- Pérdida de masa muscular:
Con una dieta balanceada y una buena rutina de ejercicios deberías perder unos 500g a la semana. Si pierdes más de esto, aunque podría ser alentador para ti, debes considerar que no solo estás perdiendo la grasa indeseada, sino que también pierdes masa muscular, que no solo deberías conservar, sino también fortalecer.
Conclusiones:
En muchas ocasiones, adelgazar rápidamente no es sostenible, de manera que podemos recuperar el peso que habíamos perdido. En lugar de confiar ciegamente en dietas milagro, debemos adoptar hábitos saludables que podamos mantener a lo largo del tiempo. Por lo tanto, lo ideal sería reducir, poco a poco, nuestra ingesta de calorías y realizar ejercicios frecuentemente para obtener nuestro cuerpo deseado y mantenerlo a largo plazo.
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Dra. Liliana Pernía,
Médico Nutrólogo
