Qué comer si tienes colon irritable:
También se conoce esta enfermedad como Síndrome de Intestino Irritable (SII), caracterizado por dolor abdominal, hinchazón, y cambios en el hábito de las deposiciones que puede cursar con períodos de diarrea o de estreñimiento, o ambos.
Realizar un plan de alimentación que incluya alimentos que no ocasionen inflamación de la mucosa intestinal es fundamental para evitar molestias abdominales como distensión y dolor, que incluso pueden interferir con la realización de las tareas diarias.
Si tu médico te ha diagnosticado Síndrome de Colon Irritable además del tratamiento médico farmacológico, es conveniente que realices una dieta que debe ser personalizada, ya que de esta manera se puede determinar la tolerancia a los alimentos en cada caso particular.
Sin embargo, a continuación te vamos a mencionar de manera general los alimentos que debes evitar, ya que se relacionan con exacerbación de los síntomas, y cuales te recomendamos incluir para mejorar los síntomas.
Es importante recalcar que la alimentación debe ser variada y equilibrada, disminuyendo el consumo de alimentos que pueden producir distensión abdominal y gases, pero sin realizar dietas muy restrictivas ya que generan déficit de nutrientes que alteran la microbiota y además conllevan a déficit de peso.
Alimentos que debes evitar consumir:
- Café.
- Bebidas alcohólicas.
- Gaseosas.
- Chocolate.
- Verduras crudas.
- Verduras que producen gases como col, coliflor, coles de brucelas y brócoli.
- Cebolla, ajo y espárragos, champiñones, puerros, aguacate.
- Legumbres.
- Lácteos con alto contenido de grasa.
- Germen de trigo.
- Picantes, alimentos con alto contenido en grasas.
- Evita los alimentos ultra procesados como galletas, dulces, tortas, alimentos con alto contenido en azúcares y grasas y aditivos.
- Evita frutas críticas y con mayor cantidad de fructosa como manzana, pera, melocotones, mango, uvas, cereza, mora,sandía, ciruelas, granada, higo y dátiles.
- Evita los frutos secos.
Puedes incluir en tu alimentación diaria:
- Cereales como el arroz blanco (harina y tortillas), el maíz y derivados (harina, polenta y tortitas), la avena ( pan, salvado y cereales de desayuno) y la quinoa.
- Puedes comer tubérculos como la yuca.
- Carnes preferiblemente blancas como pollo, pavo y pescados, carnes rojas magras ocasionalmente (sin grasa).
- Evita comer huevos fritos, puedes comerlos sancochados, escalfados o tipo tortillas con vegetales, si te producen gases puedes comer solo las claras de huevo.
- Lácteos preferiblemente leche deslactosada o descremada, puedes sustituir por bebidas vegetales de almendras, avena o arroz, prefiere quesos curados, bajos en grasas.
- Puedes consumir verduras cocidas como acelgas, judías verdes, tomate preferir sin semilla y sin concha, zanahorias, calabacín, berenjena, calabaza, escarola.
- Frutas como el plátano, lechosa, arándanos, coco, frambuesa, fresas, kiwi y piña.
- Consume suficiente agua, aproximadamente 2 litros al día.
Recomendaciones generales:
Debes realizar tus tres comidas diarias, desayuno, almuerzo y cena, y puedes incluir dos refrigerios.
Debes masticar bien los alimentos, ya que facilita la digestión.
Evita el uso de edulcorantes artificiales.
Debes seguir estas recomendaciones nutricionales por un periodo de 2 a 6 semanas, luego comenzar a incluir poco a poco los alimentos restringidos según sea la tolerancia.
Una alimentación sana y equilibrada acompañada de actividad física te ayudará a mejorar los síntomas y por ende tu calidad de vida.